Encontrar monovarietales de caíño tinto sigue siendo algo excepcional, pero obtener un blanc de noirs de la refinada uva tinta parece ser prácticamente imposible. Gracias a la mente inquieta de Xurxo Alba, ahora podemos disfrutar de la energía y la distintiva personalidad de este vino blanco que rinde homenaje a los tradicionales vinos de corrido (lágrima).