El placer de lo complejo A finales del siglo XIX, los vinos de Tarragona disfrutaban de un reconocido prestigio dentro del comercio internacional. En nuestra bodega se elaboraban vinos licorosos al estilo de los “grandes” de la época: Oporto, Jerez o Sauternes, entre otros. En el año 1947, todos estos vinos de alta graduación fueron los primeros con un reglamento dentro de la D.O. Tarragona y son conocidos con la denominación “Tarragona Clásico”.