Anís del Mono seco

El Anís del Mono seco se elabora mediante un proceso de destilación que se lleva a acabo en alambiques. Los aceites que resultan de este trabajo se mezclan entonces con el azúcar de caña, el agua desmineralizada y el alcohol neutro. Este anís, además, se constituye a partir de la proporción de mezcla de las materias primas, agua químicamente pura; jarabe de azúcar refinado y filtrado y alcohol lo que crea de él mismo dos variedades: Anís del Mono seco , con etiqueta verde y Anís del Mono dulce, con la roja. Historia La  historia de Anís del Mono comienza a finales del siglo XIX y está construida de anécdotas y de inspiraciones llegadas de distintas partes del mundo. La primera de ellas es el origen de su nombre: Vicente Bosch, el creador de Anís del Mono, recibió en una ocasión como regalo de negocios un simpático monito proveniente de América, el cual acabó bautizando a la marca. La historia que inspiró al diseño de la botella fue bastante más romántica. El propio Bosch andaba buscando un regalo especial para su mujer y fue en la plaza Vendôme de París donde encontró el perfume perfecto y, en él, la inspiración para su botella de corte adiamantado que se ha convertido en estándar de la categoría. La etiqueta de la botella también encierra algunas curiosidades que hacen de ella todo un símbolo de identidad, como el error ortográfico de  destillación  y que todavía hoy se mantiene. Pero quizás lo más significativo sea el rostro del propio mono: sus rasgos humanoides están basados ¡en el mismísimo Charles Darwin! Sin duda un guiño al debate de aquella época sobre la teoría de la evolución. El Anís del Mono se ha convertido en un icono que lleva vivo desde 1870 y que ha conseguido llegar a lo más alto. Su historia, además, está constituida a partir de anécdotas e inspiraciones que provienen de diferentes partes del mundo. Perfect serve Anís del Mono seco Es perfecto para consumir solo o con limón,  sin embargo hay diversas maneras de disfrutar de su sabor. Una de ellas es la torta de anís, con la que terminarás chupándote los dedos. Receta: Para elaborar este deliciosa receta necesitarás: 1 masa de hojaldre redonda 150 gr de mantequilla Anís del Mono 4-5 cucharadas de azúcar Papel de horno Piñones o cualquier otro fruto seco al gusto Cuando dispongamos de todos los ingredientes, estaremos preparados para ponernos manos a la obra. Primero tendremos que precalentar el horno a 200 grados arriba y abajo.  Una vez esté calentándose, estiraremos la masa de hojaldre con un rodillo para intentar dejarla lo más fina posible. Lo haremos sobre el papel de hornear para luego meterlo directamente al horno. Cuando hayamos estirado la masa, la untaremos de anís sirviéndonos de un pincel. Tras ello, derretiremos la mantequilla y la untaremos también. Después esparciremos cucharadas soperas de azúcar por toda la base y añadiremos los piñones o los frutos que más nos gusten. Por último, horneamos en el horno a 180 grados durante 10-15 minutos, hasta que lo veamos doradito. Cuando lo saquemos, lo regaremos con abundante anís, viendo cómo chisporrotea. Lo dejamos enfriar un poco, ¡y a disfrutar! Nota de cata Vista: incoloro, transparente y brillante Nariz:  aroma lleno e intenso Boca: sabor persistente y seco Información adicional Anís del Mono seco Graduación alcohólica: 40° Vol. Capacidad: botella de 70 cl No dudes en comprar Anís del Mono seco  en nuestra tienda a un mejor precio y de forma sencilla. Si deseas consultar el resto de nuestro catálogo  visita el apartado tucafeteria.es/tienda en nuestra página web. Podrás escoger entre una amplia variedad de artículos aquellos que mejor se adapten a tus gustos y preferencias.