Ensayo que aborda una de las cuestiones fundamentales de la política española: el problema nacional-regional y el equilibrio entre la nación española y las diversas realidades nacionales y regionales que coexisten. Edurne Uriarte examina la transformación de la idea de España a lo largo de la transición democrática y la consolidación del Estado autonómico. El libro analiza la evanescencia de la idea de nación española, la dificultad de la izquierda para asumirla, la influencia del franquismo y las deficiencias del Estado autonómico. Propone una reflexión sobre el "patriotismo constitucional" como una fórmula para avanzar en la solución, contrastando los modelos de nación política y etnicista.