Cuando el patriarca de una rica familia griega muere envenenado, todos los miembros del clan parecen tener motivos para haber cometido el crimen. En esta historia, Agatha Christie construye una intriga absorbente en la que los secretos familiares y la ambición se entrelazan hasta un final inesperado. Una novela ágil, brillante y con el característico ingenio de la reina del misterio.