Este volumen reúne tres de los casos más representativos del célebre comisario Maigret. Con su habitual estilo sobrio y su aguda capacidad de observación, Simenon nos sumerge en atmósferas densas, en pueblos y barrios donde el crimen se mezcla con la rutina, y donde cada gesto oculta una historia. Los relatos no son solo policiales: son también retratos humanos profundos, con personajes complejos y ambientes palpables. Ideal para lectores que buscan un buen misterio sin artificios y con una gran carga psicológica.