En esta segunda parte de sus Mitológicas, Lévi-Strauss sigue ahondando en el análisis del pensar mítico, ilustrado aún por creaciones de los naturales de Sudamérica. La trama se complica, aparecen nuevas dimensiones: a la "lógica de las cualidades sensibles" del primer volumen se añade ahora una auténtica "lógica de las formas" que representa un progreso hacia la abstracción, hacia un mundo conceptual liberado ya de la servidumbre impuesta por la experiencia concreta.