Todos los detectives se llaman Flanagan es el segundo libro de la exitosa saga juvenil protagonizada por Juan Anguera, alias "Flanagan". El joven detective de barrio, inteligente y sarcástico, se enfrenta a un nuevo caso que parece sencillo: encontrar a un bebé desaparecido. Sin embargo, lo que empieza como un favor a una compañera de clase (la guapa Carmen) se complica rápidamente, involucrando a Flanagan en una trama de tráfico de bebés, delincuencia juvenil y problemas sociales. Con su característico estilo directo y lleno de humor, la novela aborda temas serios desde la perspectiva de un adolescente que intenta hacer lo correcto en un mundo de adultos a menudo corrupto.