En la actualidad, la imagen es una herramienta diagnóstica principal en la práctica clínica hospitalaria. La dificultad en la anamnesis y en la exploración de la población pediátrica convierten al radiólogo en una pieza clave del proceso asistencial. El aprendizaje de las particularidades del manejo de los niños, de la fisiopatología y de las manifestaciones en imagen de las enfermedades pediátricas es todo un reto para médicos residentes y adjuntos en formación. Se incluyen los temas de mayor relevancia clínica en la patología neonatal, del lactante, del niño y adolescente ordenadas en secciones. Además, cuenta con dos secciones de gran impacto para la toma de decisiones y de creciente interés, como son el de patología fetal y el de medicina nuclear. Algunos temas tienen un claro enfoque clínico para reproducir la práctica asistencial del radiólogo: el traumatismo no accidental, la infección osteoarticular o la hidrocefalia. También se abordan las patologías menos frecuentes y de diagnóstico complejo que requieren un estudio específico como son la patología cardíaca, las displasias óseas, la patología orbitaria o la patología de la glándula mamaria. Conocer las particularidades en el manejo diagnóstico del paciente pediátrico, las estrategias de reducción de dosis y los principios generales en el intervencionismo pediátrico. Repasar la anatomía fetal básica en resonancia magnética y conocer las principales patologías del SNC y de cuerpo. Identificar la patología malformativa, infecciosa y tumoral más frecuente en el neonato, en el lactante y en el niño mayor. Orientar el proceso diagnóstico y conocer el tratamiento de la patología urgente más relevante en Imagen Pediátrica. Familiarizarse con las principales herramientas diagnósticas en Medicina Nuclear aplicadas a la patología pediátrica.