¿Tienes problemas con poros tapados, piel áspera o imperfecciones? La mascarilla purificante es la solución ideal para limpiar profundamente y eliminar obstrucciones, logrando así una piel suave, fresca y matificada. Entre sus ventajas: Limpia a fondo y elimina impurezas desde la primera aplicación. Su capacidad absorbente, gracias al caolín, actúa sobre el exceso de grasa. Ayuda a desobstruir y disminuir la visibilidad de los poros. Combate los puntos negros y mejora la textura cutánea. Además, gracias a las propiedades antioxidantes del propóleo, contribuye a retrasar los signos del envejecimiento.