Es un aliado imprescindible para disimular imperfecciones provocadas por rojeces, irritaciones o pequeños capilares visibles. Gracias a su fórmula en formato lápiz retráctil y su tono verde corrector, neutraliza visualmente las áreas enrojecidas del rostro al instante, creando una base uniforme y natural para aplicar la base de maquillaje. Su textura cremosa se desliza con facilidad, se difumina sin esfuerzo y se adapta bien a todo tipo de piel, incluso las sensibles. Compacto y práctico, es ideal para llevar en el neceser diario.