En algún momento de nuestra vida, muchas son las causas por las que nuestro sueño puede verse afectado: el acúmulo de tensión, las preocupaciones, el estrés, el ritmo laboral, las responsabilidades diarias, etc. Todos estos son factores que nos provocan un ‘agobio’ acumulado que no nos deja conciliar el sueño. Si dormimos bien durante toda la noche nos despertamos frescos para poder afrontar el nuevo día con fuerzas renovadas Cómo tomar Se recomienda tomar media hora antes de acostarse. Verter el polvo de un sobre instantáneo en un vaso y añadir agua caliente o fría