Las diarreas comunes: las post-antibióticas, las del viajero o, también, las virales (como las que se producen por rotavirus en la edad infantil) producen una alteración del equilibrio de la flora intestinal o conjunto de bacterias necesarias para el buen funcionamiento del intestino. Una infección bacteriana, un virus, un cambio en la dieta o un tratamiento antibiótico pueden llegar a producir una disbacteriosis o modificación del ecosistema bacteriano normal.