El corazón del Clorador Salino PQS es su célula, compuesta por una carcasa que suele ser transparente, en su interior alberga los electrodos donde se produce la electrolisis así como el sensor detector de flujo que regula la circulación de agua. Los electrodos o placas de las células suelen estar fabricados con materiales de alta calidad como el titanio, y recubiertos con metales nobles que aumentan su conductividad y duración, de ahí el elevado coste de la célula y la importancia de cuidar su mantenimiento. La función de auto-limpieza por inversión de polaridad facilita este trabajo y está presente en la mayoría de equipos. Cuanto mayor sea el número de placas, mayor será la superficie de producción de hipoclorito sódico. Las células de los cloradores salinos PQS son fabricados por Pool Technologie y tienen una durabilidad de unas 10.000 horas, de las más largas que podrás encontrar en equipos de cloración salina.