Cuando utilizamos productos orgánicos clorados (ácidos tricloro isocianúricos y dicloro isocianurato de sodio) se forman los llamados ,ácidos isocianúricos, materiales estabilizantes del cloro. Mientras que la ventaja del uso de productos orgánicos del cloro reside claramente en la presencia de un elevado porcentaje de cloro activo (hasta un 90%), precisamente la sustancia estabilizante ácido isocianúrico puede perjudicar la efectividad y velocidad de eliminación de gérmenes del cloro con una alta concentración en agua (>50 mg/l). Para no enfrentarnos a este hecho aumentando la adición de cloro (con lo que aumentaría el aporte de ácido isocianúrico) se recomienda medir periódicamente también el nivel de ácido cianúrico, así como el nivel de cloro en el agua.