Esta figura colgante de pez, elaborada en metal blanco, reimagina la magia del océano en un diseño etéreo y elegante. Su estructura fluida captura el movimiento sutil de las olas, transformando cualquier espacio en un rincón de sofisticada serenidad. Con delicadeza y estilo, esta pieza es más que decoración; es una experiencia visual que invita a soñar despierto y sumergirse en la tranquilidad de aguas profundas. Perfecta para quienes buscan añadir un toque artístico y original a su ambiente, evocando la belleza y diversidad del mundo marino con lujo y poesía.