La mecánica es tan intuitiva como adictiva: turnos ágiles, tensión constante y la satisfacción de encontrar la pieza perfecta justo a tiempo. Es ideal para tardes en familia, sobremesas y quedadas con amigos; se explica en segundos y engancha desde la primera partida, entrenando reflejos, visión espacial y ese “modo puzzle” que tanto gusta. Además de divertido, es un juego con alto valor educativo: mejora la planificación, la concentración y la toma de decisiones bajo presión sin necesidad de pantallas. Perfecto para regalar a fans del Tetris de siempre y a nuevas generaciones que lo descubrirán por primera vez. Adaptación de Tetris al formato de mesa, rápida y adictiva. Turnos ágiles y reglas inmediatas para todas las edades. Entrena visión espacial, atención y planificación. Componentes resistentes, pensados para mucho trote. Plan perfecto para familia, amigos y viaje