Instrucciones de uso: Echar los polvos granulados en agua (preferiblemente en un recipiente de cristal) y remover hasta obtener una textura similar a la gelatina. Mientras se remueve, poner una olla con agua a calentar. Colocar el recipiente con el apresto en el agua caliente (al baño María), removiendo de vez en cuando hasta su completa disolución. Conservar en el frigorífico una vez preparado. Cantidad recomendada: Aproximadamente 250 g por cada litro de agua. Esta proporción es orientativa y puede ajustarse según el grado de concentración que se necesite, dependiendo del tipo de tejido y del trabajo a realizar.