¿Es satanista el rol? ¿Lo juega gente agresiva? ¿Provoca desórdenes mentales? ¿Solo lo puedes jugar si eres gordo y calvo? La respuesta a todo esto es NO, por supuesto*. Pero la sociedad lleva mucho tiempo con esas preguntas en la punta de la lengua y ha llegado la hora de cambiar la narrativa. No contestes esas preguntas, ¡haz la tuyas propias! En Ser Rolero: una guía práctica vas a aprender, con grandes dosis de humor y siempre desde el buen rollo, a conocerte un poco mejor, saber qué te une al rol y saber expresarlo en voz alta.